viernes, 7 de diciembre de 2007

"Hasta luego, chau, gracias"


Diego Simeone se despidió de Estudiantes de La Plata ovacionado por los hinchas tras derrotar por 2 a 0 a Olimpo de Bahía Blanca, en lo que fue su último partido como DT del Pincha.

A la medianoche, el “Cholo” sentenció: "Dejamos Estudiantes, un lugar donde hemos compartido muy lindas situaciones durante un año y medio. Entiendo que es el momento para tomar esta decisión, me duele por todo lo que hemos construido pero también estoy seguro de la decisión que estoy tomando. Agradezco a toda la gente y a los jugadores porque han demostrado ser grandes hombres y profesionales. Estoy tranquilo porque banqué situaciones y por una cosa u otra no se han podido dar, es el momento para dejar y seguir en contacto con toda la gente de la mejor manera. Fue un día difícil, me sentí en todo momento incómodo, pero también estoy tranquilo porque le di lo mejor que tengo a Estudiantes, dejamos un equipo con un rasgo muy marcado. Agradezco a los periodistas, sobre todo a los de La Plata, a toda la gente que hoy ha coreado mi nombre... Y bueno, un hasta luego, chau, gracias".

El motivo: la Comisión Directiva del club no habría cumplido con sus expectativas de refuerzos.

Por su parte, en River le abrieron las puertas hace rato y, dado este paso, Simeone es el nombre que suena más fuerte en Núñez para reemplazar al Kaiser.

G. P.

2 comentarios:

Santiago Correas dijo...

No es la manera. El cholo se podría haber ido de otra forma, no de esta. Pedir refuerzos que superan cualquier presupuesto es forzar una salida. Igual, gracias por todo Cholo.

Anónimo dijo...

A ver si se dan cuenta de la verdadera cara de Simeone. En Racing le movió el piso a Quiroz para ser dt, porque ya no podía correr más. Quiroz hacía lo que podía para que él juegue: lo puso de doble cinco con Falcón (que corría todo) al lado, de 8. Pero ya no podía más. Después no le fue tan bien: perdió varios partidos, pero como terminó ganando un par, la prensa lo hizo quedar bien parado, porque en su último partido como técnico de Racing le ganó a River de visitante. Después, ya dirigiendo en La Plata, en un Estudiantes- Racing, le gritó el segundo gol "al equipo de sus amores" como si fuera la final del mundo. Es hincha del Rojo. Es un vendehumo. Porque también dijo que los hijos son de Racing y están las fotos donde los hace salir a la cancha con la remera de Estudiantes. También durante un tiempo la quiso dar de místico con sus declaraciones.
Y ahora, con todo esto, espero que la gente se de cuenta de una buena vez quién es este tipo: yéndose a River antes de que termine su contrato porque le tira la plata. Pidió a Crespo, Mariano González y Abreu. Un caradura. Le sacó la careta Pablo Álvarez, a quien banco un 100 por ciento.
Me voy, me enojé.

Guido (http://aunqueda.blogspot.com)